La posesión, aunque la lógica incida en su simplicidad, es una de las métricas más importantes y su interpretación es fundamental, ya que, entre otros, permite interpretar otras métricas como el ritmo de juego (PACE), las eficiencias ofensiva y defensiva, etc., cuyos cálculos se basan en ésta.
¿Pero en realidad que es una posesión?
Se dice que un equipo tiene posesión cuando el balón cambia del equipo a éste, y ello va a ocurrir cada vez que un jugador del equipo contrario:
- Convierta un tiro de campo (de 2 o 3 puntos);
- Falle un tiro de campo y ese equipo no coja el rebote ofensivo;
- Pierda el balón (algunas fuentes agregan, para un cálculo de posesión más preciso, las "pérdidas de balón que se asignan a los equipos");
- Vaya a la línea de tiros libres para lanzar dos o tres tiros y anota el último tiro o lo falla, pero el equipo atacante no obtiene el rebote ofensivo del último tiro fallado.
Por tanto, una posesión comienza (Kubatko et al., 2007) cuando un equipo obtiene el control (o posesión) del balón y termina cuando ese equipo cede el control del balón. Los equipos pueden ceder la posesión del balón de varias formas, que incluyen (1) tiros de campo o tiros libres que hacen que el otro equipo saque la pelota fuera de límites del campo, (2) rebotes defensivos y (3) pérdidas de balón.
Hay que tener en cuenta que, según esta definición de posesión, un rebote ofensivo no inicia una nueva posesión; un rebote ofensivo inicia una nueva jugada.
¿Es una posesión lo mismo que una jugada?
Aunque lo parezca no son el mismo término. Se dice que empieza una nueva jugada cada vez que:
- Se ha producido un tiro de campo anotado o fallado;
- Se ha producido una pérdida de balón;
- Se ha producido una falta y se han de lanzar tiros libres o sacar de banda.
Por ejemplo, un equipo puede lanzar a canasta, fallar el tiro (finaliza la primera jugada), coger el revote ofensivo, lanzar de nuevo y fallar (finaliza la segunda jugada), coger el revote ofensivo, tirar y recibir una falta con la que ha de lanzar dos libres (finaliza la tercera jugada), anotando los dos (finaliza la posesión). Por tanto, solo se ha producido una posesión, pero se han desarrollado tres jugadas.
¿Cómo se calcula?
Existen dos formas de calcular (estimar) el número de posesiones (POS), una a la que llamaremos básica o tradicional y otra más específica.
Fórmula de posesión básica (eq. 1)
Donde:
TCIE = Tiros de Campo Intentados (Equipo)
PERE = Pérdidas (Equipo)
TLIE = Tiros Libres Intentados (Equipo)
ROE = Rebotes ofensivos (Equipo)
¿Qué son los valores 0,44 y 0,96?
Los multiplicadores 0,44 y 0,96 se utilizan para ponderar las posesiones en casos especiales que se pueden dar durante el partido (Kubatko et al., 2007):
- El ponderador 0,44 se usa dado que no todos los tiros libres acaban en posesión. Los tiros de faltas técnicas por ejemplo no lo hacen, mientras que puede haber más de dos tiros libres en una posesión. Un valor lógico sería tomar 0,5 ya que ponderaría los dos tiros libres tras una falta, pero como sabemos hay faltas de tiros de tres o dos más uno, situaciones que modificarían este valor. La investigación ha estimado que aproximadamente el 44% de todos los tiros libres acaban siendo posesiones.
- El ponderador de 0,96 tiene en cuenta situaciones del juego tales como que un jugador defensivo mande el balón fuera del campo en un rebote. En este caso continua la posesión sin que se sume un rebote ofensivo. O que el tiro se realice al final del cuarto y no se de la posibilidad de un rebote.
¿Se pueden estimar las posesiones de un equipo en función de los datos que aparecen en las estadísticas oficiales?
No es posible calcular al 100% las posesiones utilizando los datos de tablas estadísticas porque, entre otras razones, los tiros libres que finalizan la posesión no se identifican, algunos cuartos terminan sin rebotes ofensivos y no todos los rebotes se atribuyen a jugadores, por ejemplo, los tiros fallados que salen fuera del campo (a menudo tiros taponados), se registran como “rebote de equipo”.
Las posesiones se pueden "estimar" utilizando los datos de puntos de las estadísticas comúnmente disponibles. Una fórmula general para estimar las posesiones de un equipo es:
Donde:
TCIE = Tiros de Campo Intentados (Equipo)
TCCE = Tiros de Campo Convertidos (Equipo)
TLIE = Tiros Libres Intentados (Equipo)
TLCE = Tiros Libres Convertidos (Equipo)
ROE = Rebotes ofensivos (Equipo)
RDEO = Rebotes defensivos (Equipo Oponente)
PERE = Pérdidas (Equipo) 1
lamda = fracción de tiros libres que pone fin a las posesiones del total 2
alpha = valor entre (0,1)
1 incluye pérdidas de balón del equipo, como infracciones de 5 segundos o 24 segundos que no se atribuyen a ningún individuo. Estos se promedian alrededor de 0,666 por equipo y por partido.
2 Los tiros libres que ponen fin a las posesiones no incluyen los primeros tiros libres de dos, los primeros y segundos tiros libres de tres, o los tiros libres debidos a técnicas y faltas antideportivas. Además, los tiros libres después de los tiros de campo realizados no se cuentan, ya que el lanzamiento de campo realizado ya ha contado esa posesión. Se estima que el 43.8% de los tiros libres fueron tiros libres que terminaron con la posesión.
La ecuación anterior reconoce que cada pérdida de balón, canasta realizada o posesión efectuada tras un tiro libre constituye una posesión, es decir, tiene un valor de posesión de 1. Los intentos de tiros de campo fallados y los intentos de tiros libres fallados que finalizan la posesión comparten el valor de la posesión (1 punto) con los rebotes defensivos. Los intentos de tiros de campo fallados y los intentos de tiros libres fallados que finalizan la posesión obtienen una cuota alpha de ellos, mientras que el rebote defensivo obtiene una cuota 1 - alpha. Los rebotes ofensivos deshacen los intentos fallidos de tiros de campo y los tiros libres fallidos que terminan con la posesión, por lo que su valor de posesión es -alpha.
Nota: Si tomamos los valores de alpha = 1 y de lamda = 0,44 obtenemos la ecuación denomina “posesiones perdidas”, donde es importante señalar que implica que los rebotes defensivos no tienen valor de posesión. Otra formulación común, “posesiones ganadas”, asume que alpha = 0 e implica que los rebotes ofensivos, los intentos de tiros de campo fallados y los intentos de tiros libres fallados que terminan en posesión no tienen valor de posesión.
Otra fórmula "realmente simple" (para la NBA actual) es
Esta fórmula predice posesiones casi tan bien como más fórmulas complicadas.
¿Cómo medir las posesiones individuales?
De forma individual podemos medir las posesiones donde participa un jugador de ataque (no tiene sentido medir las defensivas). En este caso, podemos distinguir entre posesiones anotadas, que incluyen las que acaban en tiros anotados o asistidos, y no anotadas, tiros fallados o pérdidas.
Posesiones anotadas
Con
Posesiones no anotadas
Donde:
TCIJ = Tiros de Campo Intentados (Jugador)
TCCJ = Tiros de Campo Convertidos (Jugador)
TLIJ = Tiros Libres Intentados (Jugador)
TLCJ = Tiros Libres Convertidos (Jugador)
PERJ = Pérdidas (Jugador)
MINJ = Minutos (Jugador)
MINE = Minutos (Equipo)
ASE = Asistencias (Equipo)
Conclusiones
Las posesiones serán aproximadamente las mismas para dos equipos en un partido, por lo que éstas proporcionan una base útil para evaluar la eficiencia de equipos e individuos, aunque esta no sea una estadística registrada oficialmente en la mayoría de las ligas de baloncesto. Es por ello que, tanto equipos como jugadores van a intentar sumar más puntos por posesión que sus oponentes, ya que eso será un factor importante para alcanzar la victoria.
Nota: No se cuenta la posesión al final de un período cuando quedan menos o igual a cuatro segundos y no hay tiros de campo, tiros libres o pérdidas de balón.
Referencias
Kubatko, J., Oliver, D., Pelton, K., y Rosenbaum, D. T. (2007). A starting point for analyzing basketball statistics. Journal of quantitative analysis in sports, 3(3), 1-24.